miércoles, 8 de septiembre de 2010

Nadie me puede robar!!

El día que golpearon la ventanilla del carro para robarme el teléfono celular de mis sueños, me robaron la certeza de que jamás podría pasarme nada porque soy invisible, al final me dejaron el celular porque mi torpeza me ayudó botándolo en el suelo del carro y la precaución me aconsejo que en un país como el mío en donde se roban cientos de celulares cada día lo mejor sería llevar uno extra de poco valor para entregar algo en caso de un asalto. Ese día descubrí que cuando alguien te roba no tiene nada que ver con las cosas que se lleva sino con lo que se rompe por dentro, porque se llevan tu paz, tu inocencia pero a la vez te ayudan a recordar que eres mucho más que las circunstancias que te rodean, que siempre hay oportunidad para poner la vida en perspectiva y agradecer la dicha de tener una vida, de disfrutarla y de hacer muchas más cosas que ni siquiera te pueden robar.

El día que te vi en los brazos de alguien más y sentí por primera vez esa punzada en el centro del alma que no se olvida y que se parece mucho a la decepción, a la rabia, al orgullo roto, ese día te robaste la confianza que había puesto en ti, el amor tan grande que te había tenido hasta entonces, te robaste el respeto que siempre te tuve, ese día sentí también esta mezcla de impotencia y de tristeza que deja un sabor amargo en la boca y nauseas en el estómago acompañado todo de una confusión mental que no sabes si agradecerle a Dios de haberte dado cuenta o reclamarle por permitirte pasar por algo así.

El día que un pendejo se atrevió a decirme una patanada viéndome a los ojos, ese día sentí por primera vez esa vergüenza rabiosa desde mi más sensible posición de mujer, ese día aprendí de una vez y sin anestesia que la mayor desventaja de tener los oídos abiertos es que te arriesgas a escuchar cualquier tontería mayúscula que se le ocurra a otro sin que te alcance el tiempo o la sorpresa para cerrarlos y no contaminarte con la basura que alguna gente lanza sin pensar, ese día me robaron la sonrisa indiscriminada, me hicieron dudar de las intenciones de los ojos que me observan, ese día me robaron la libertad de saludar con abrazo apretado para expresar mi cariño y me recordaron que para considerar a alguien un hombre deben reunirse muchas más cualidades que las puramente anatómicas.

El día que en medio de la crisis de familia y de salud más grande que he tenido en mi vida adulta, mi amiga me demostró su desacuerdo colgándome el teléfono para no volver a contestar jamás como muestra de su desaprobación a mis decisiones sin importarle escuchar de mí ninguna explicación más que lo que ella pensó considerando que eso le daba derecho a juzgar y a pensar que la amistad es algo que se rompe cuando las circunstancias cambian, ese día se me rompió el corazón, me dolieron otra vez todas las decisiones difíciles que he tenido que tomar y me di cuenta de nuevo que cada vez que juzgo a alguien es como si apuñalara su alma, ese día se me rompió la ilusión de creer que tengo muchos amigos para aprender que tengo muchos conocidos y algunos tesoros que son amigos verdaderos y que valen como un hermano en tiempo de crisis.

Hoy, haciendo este recuento de robos me doy cuenta que nadie me puede robar lo que soy, lo que he aprendido de cada cosa que me ha pasado en la vida, nadie me puede robar las ideas, las ganas de ser feliz sin depender de las circunstancias sino de la Fe, nadie me puede robar los sueños…hoy, haciendo este recuento de perdidas me doy cuenta que en realidad uno gana con cada cosa que Dios permite que pase, que de todo se aprende y que siempre ante cualquier circunstancia uno tiene siempre la opción de escoger lo bueno y de ser auténtica, plantear la mejor actitud y sacarle el jugo a la vida, porque la vida es el tesoro mas valioso que tenemos y nadie podrá nunca robarnos lo que hemos gozado, lo hemos dado, lo que hemos disfrutado, lo que hemos creído en alguien o lo que hemos invertido en un proyecto que vemos realizado…Hay una parte de nosotros en cada cosa que emprendemos, en cada amigo que apoyamos, en cada persona que amamos, en cada logro que alcanzamos, en cada letra que escribimos y en cada uno que lo lee y eso nadie me lo puede robar!!!

3 comentarios:

  1. HIJA, ES CIERTO EN LA VIDA UNO SUFRE VARIOS ROBOS, PERO QUE NO TE AFECTEN, PUES CADA UNO TE ENSEÑA HA TENER DIFERENTES FORTALEZAS Y ACRECENTARLAS , ESO SE LLAMA MADURAR, HA VECES DUELE Y HA VECES DA CÓLERA PERO HA LOS QUE AMAMOS A DIOS, TODO ABSOLUTAMENTE TODO, POR RIDICULO QUE PAREZCA, SOLO NOS AYUDA PARA BIEN , TU MAMÁ

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  2. En estos tiempos, o talvez en todas las épocas siempre nos han robado. Algunas veces nos damos cuenta, otras veces nosotros mismos entregamos lo que nos están robando, y lo damos con amor, con los ojos cerrados. Hasta que llega el día que nos damos cuenta que fue un robo descarado. Que podemos hacer hija? Nada, absolutamente nada, porque no podríamos vivir entre cuatro paredes escondidos de la realidad mundana que nos rodea. Sigue siendo la misma, amando sin fronteras , soñando, refugiándote en tu jardín secreto cuando quieras estar sola. Lo mas valioso en la vida no tiene precio, y a los ladrones no les importa robar palabras prodigiosas, y jardines mágicos. En este momento lo único que me gustaría robarte es un beso. Te amo

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  3. Un beso para los dos y para cada uno, gracias a ambos por su apoyo, por leer mis locos pensamientos y porque si no fuera por ustedes, el trozo de su corazón que hay en mi vida...serguro no pudiera ser como soy. Y nadie puede robarme eso!!

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