domingo, 18 de julio de 2010

Cuando sea grande

La lavadora suena a lo lejos con su ruido que ya no me estorba, la televisión grita los sonidos de las caricaturas en que los padres son los bobos y los padrinos son mágicos y conceden deseos extremos, desde aquí veo como Eva dobla ropa con sus pequeñas manos que me sacan de todos mis apuros caseros… En medio de todo esto yo intento concentrarme para escribir, enviar algunas cotizaciones, pensar en como contrarresto la horrible influencia de la tele en mi hijo de seis años que cree que tiene derecho a tortillas con queso media hora después de rechazar el almuerzo que pasé cocinando por dos horas…Suspiro cansada a pesar de no haber hecho ejercicio, de no haber salido a trabajar hoy y peor aún de ser apenas lunes.

Los días se supone se midan por horas y yo se supone sea una mujer inteligente y capaz, no sé porque no logro comprender lo de las horas y los minutos, para mí aun los días se miden por sucesos…el día que nació Andrés, el día que José Fernando me dijo a sus cortos 4 años que me ama de ida y vuelta a la luna, el día que me descubrí sola, el día que comprendí que estar sola no es del todo malo y que estar mal acompañada no es para nada bueno, el día que mi amiga me llamo llorando para contarme que le dolía una parte en el alma que no sabía que existía, el día que mi primita me contó que descubrió que el cuerpo siente casi tan intenso como el corazón, el día que Eva se fue porque quería prosperar y no pude detenerla a pesar de mi desconsuelo, el día que regreso llorando y jurando que nunca más se volvería a ir y que la recibí con los brazos abiertos como a la hija prodiga, solo para que un día algunos meses después se fuera de todos modos cuando no aguantó lo que yo tampoco aguanto.

El día que solita frente a una taza tibia de café instantáneo aun mas deprimido que yo analicé con calma mi situación y me di cuenta que por no cometer los errores de mi mamá cometí los míos y tendría que esperar 30 años para saber si mis hijos podrían perdonarme como la perdone del todo a ella mientras intentaba sopear mi champurrada vieja y porosa. El tiempo es nada si corre sin que nada pase, si los días sirven para vivirlos, para equivocarse y aprender, para disfrutar y reír hasta llorar, para llorar con la misma dignidad con que se ríe, para pensar y no andar por allí haciendo muladas, para corregir las muladas que se hicieron por vivir sin pensar, para ser y rehacer, para comer y quedarse feliz y satisfecho, para conocer el hambre, ese hoyo en la panza que te nubla la mente y entender a una madre desesperada que con esa hambre colectiva es capaz de robar lo que sea por un par de tortillas y un poco de frijoles que no hacen sino distraer el hambre mientras ella encuentra otra cosa para robar. Si los días son para cansarse pero no frente a un video de un bosque virtual mientras se escuchan ruidos armoniosos de cascadas falsas y pájaros que ya se extinguieron de tanto que les botaron los arboles para hacer los papeles de inscripción al gimnasio.

Cinco minutos tarde…para qué? Si cuando un niño espera a su mamá en la puerta de un colegio vaciándose esos mismos minutos son tan eternos que jamás llegan a olvidarse, si cinco minutos frente a un helado de cajeta son tan largos que la gota de helado derretido llega en cámara lenta al suelo y hasta dan ganas de lamerlo. Si en Facebook dice que los comentarios se están haciendo hace dos segundos. Será que tengo descompuesto el reloj interno o será que esto me ocurre porque no tengo reloj de pulsera, el día que Andrés me dijo la hora exacta, ese día me vi obligada a reconocer que fuera del muro que rodea mi casa, todos miden el tiempo y consideran algunos sentimientos apropiados y otros inapropiados… Mamita, tu sos muy divertida porque estas loquita dijo José Fernando el otro día, porque nos sentamos en el parqueo de Mc Donald`s a llorar porque se perdió el juguete y ya no había otro igual…mejor hacele cosquillas dijo Andrés tal vez así aprende a poner atención y no dejar tiradas las cosas que no van a volver a salir en promoción… Allí mismo apliqué la terapia correctiva alcanzando los objetivos planteados por el doctor en conducta de tan solo 7 años de edad que tenía toda la razón, hasta ahora cada vez que hay que poner un ejemplo respecto a ser cuidadoso recurrimos al día en ese parqueo.

Hace unos días al pastor Chofo se le ocurrió preguntar cosas de niños en su facebook y rompió record de visitas, record de comentarios y record de risas…será que perdimos mucho tiempo viendo tele? O será que si no tuviéramos esos recuerdos comunes seríamos como hojas sueltas en el viento, sin raíces, sin pasados en común… Y hoy, recordando para premiar un refresco que ya no tomamos porque dis que no es natural, como si antes no hubiera sido lo mejor de la vida encontrar un pichel frio de Toki de fresa en la refri después de bicicletear sin miedo por horas…o minutos…o meses, da igual fue hace tanto tiempo y parece que fue ayer.

Algún día voy a ser puntual, dueña de mis emociones, madura en mis conductas y muy pero muy estable, solo me gustaría que alguno de ustedes se acuerde de mí así como soy ahora, capaz de abrazarte con toda mi energía justo aquí porque me acabo de acordar que te quiero y que haces mi vida única, cuando ya sea como se supone que tenga que ser y me vuelva ordenada, seria y muy pero muy puntual y controlada, cuando piense primero y logre no sentir tanto y tan intenso, cuando ya no vuelva a llorar en público ni a sentarme en cualquier lado, por favor alguien deme un abrazo fuerte, cánteme una canción bonita mientras me peino, pínteme los labios de rojo o haga cualquier cosa de las locuras que he hecho por ustedes en mi loco intento de hacer contacto con sus almas hermosas.

Ojalá que valga la pena eso de cambiar, de ser como todos, de tomar conciencia del tiempo, de leer noticias, de ordenarme y no comer chocolates entre comidas, de hacer ejercicio, de no dormir con mis hijos como si fuéramos tribu…Ojalá que valga la pena no decir las cosas que se sienten, ojalá que haya un lugar donde esos sentimientos se vayan sin quedar amontonados en el alma, ojalá que ser puntual y ordenada, discreta y dueña de mí misma me convierta en mejor ser humano, ojalá, hasta ahora los que conozco así, generalmente tienen gastritis, no son muy divertidos y a la hora de la verdad no se cuenta con ellos porque tenían una cita previa….Ojalá valga la pena, igual ya lo estoy intentando.

1 comentario:

  1. Siempre q recuerdo mi ninez, viene una seca morenita de pelo negro y voz aguda a mi mente. Fuiste mi primera amiga de la colonia, con la q me escapaba a jugar y a la q metia escondida a mi casa, con la q ligaba a los patojos de la cuadra especialmente a los Villamar porq eran chulos pero creidos. Conoci a temprana edad lo q eran travesuras con vos, paso el tiempo y siguio la amistad, vi como madurabas y como seguias siendo extremadamente flaca pero siempre mas alta q yo, sabia q yo era de la A y vos de la B, que seguias siendo loquita como cuando tenias 9 o 10 cuando casi estabas en los 16. Pasa el tiempo y ahora te encuentro como mama, trabajadora, profesional toda una ejecutiva ella, menos flaca y siempre loca, con la madurez de los anos y el mismo corazon de aquella primera amiga de la colonia. Con la misma esencia de los 9 o 10 con el mismo corazon y el sentimiento puro de la ninez, en acitudes o costumbres puede q cambies pero q nunca te cambie el corazon porq eso te hace diferente y especial para mi. Sos unica no hay nadie como vos, asi q no se te ocurra cambiar nunca te quiero mucho asi asi como sos vos.

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